El primer hombre que ve a Dios, es el acontecimiento más grande de todos los siglos y de los miles de años en la historia de la Iglesia y de la humanidad.
El Primer Hombre Que Ve A Dios
El Super Acontecimiento Más Grande de Todos los Tiempos
Mensaje a La Iglesia
Saludos y Bendiciones
Yo, Jesé Retoño, les doy mi paz a todos los fieles seguidores de Piedrecita, y les agradezco en el nombre de Cristo su sincera participación en este vuestro ministerio. Por favor no se aparten, y esperen el gran día que Cristo tiene reservado para todos ustedes, para toda la iglesia y para el mundo entero.
El gran día ya llegó, y se realizará el milagro. Todos ustedes los que están inscritos en el boletín de Piedrecita…mi amor y mi dedicación, para todos ustedes. Sí, especialmente para ustedes está reservada esta gran noticia Celestial. Ya llegó la hora, y ustedes serán bendecidos por la gloria de Cristo, y serán testigos de mi realidad Celestial.
Los que nos visitan por primera vez, les saludo en el nombre de Cristo. Les ofrezco mi verdad y mi evangelio, de parte del Señor Jesucristo.
Reciban la bendición de Cristo y sean guardados para la vida eterna.
Amen.
Cristo Ama la Obediencia y la Pobreza
Mi ministerio Piedrecita, es una preparación de la misión que Cristo me ha encomendado. Antes de que vean el Súper Acontecimiento más grande de todos los tiempos, les quiero animar y recordar la misión de Cristo en el mundo. Ha llegado el tiempo y quiero recordarle a “Pedro” (Papa), que Cristo no habita en edificios suntuosos. No es amigo de los lujos y ni de los honores.
Cristo no aprecia las sotanas y cardenales. No valora los banquetes. No aprecia a los sacerdotes políticos y concilios ecuménicos en la iglesia.
Cristo no aprecia las catedrales y ni su oro. Él aprecia solo aquellos que aman la pobreza y que se apiadan de los pequeños que Cristo envía a su iglesia.
El Acontecimiento Súper Más Grande de Todos los Tiempos: El Primer Hombre Que Ve a Dios
¡Sí! El más grande, el Súper grande de todos los tiempos: El primer hombre que ve a Dios. La humanidad entera ha deseado por miles de años, conocer como es Dios. Hoy sabemos que las apariciones de la Virgen de Guadalupe, es uno de los acontecimientos celestiales, más grandes en toda la iglesia.
Sé que al afirmar que lo que yo voy a mostrar, es hasta el presente, la prueba más contundente de mi loquera. Sé que me odiarán aún más, desde lo más alto, hasta lo más bajo del orden jerárquico de la iglesia.
Hoy en día, sé que yo debo ya de tener un gran título: el de ser un revoltoso, y un gran mentiroso en toda la iglesia.
La Virgen en Fátima
Pero, en las apariciones de Fátima, la Virgen María, anunció este Día.
Sí, este día ha llegado, el Papa y la iglesia lo han estado esperando, y la Virgen santísima lo preparó.
Yo Soy el Mensajero
Yo, Jesé Retoño, siendo un mendigo, un “perro callejero” y despreciado por la Santa Iglesia Católica, Apostólica y Romana, me remito a reafirmar mi postura ante el Creador.
Yo soy siervo, soy mensajero, soy profeta del Altísimo. Soy testigo ocular y viviente, y vivo en la presencia del Dios único y verdadero. Yo soy enviado del Santísimo. Voy a mostrarles el acontecimiento más grande de todos los tiempos en la iglesia y en el mundo entero.
El Primer Hombre en el Mundo Que Ve a Dios
Dios es Espíritu y verdad. Ahora se cumplen literalmente las palabras del Apóstol Juan.
Yo, Jesé Retoño, soy el testigo viviente, y doy testimonio de la verdad. Yo soy aquel pequeño anunciado por Cristo, y también estoy anunciado en el antiguo testamento. Yo soy, el primer hombre que ve a Dios, el primer hombre sobre la tierra que ve a Dios frente a frente. Sí, yo soy el que abre brecha.
Profecía de Cristo Nuestro Señor e Isaías
No hay error. Dios mismo así lo anunció desde el antiguo testamento y también en el nuevo testamento, así como ya se los demostré en mi tema: “Se Revelará la Gloria de Yahveh”. Cristo lo afirmó y hoy se cumple el tiempo asignado por Dios. Mis apariciones, son el acontecimiento más grande de todos los tiempos, para la iglesia y para el mundo entero.
Ha llegado el tiempo, y hoy se cumplirá el mensaje del profeta Isaías y las palabras de Cristo en el nuevo testamento. Hoy se cumple la letra de las escrituras, y en adelante, ustedes serán mis testigos ante Dios.
Soy un Pecador y el Más Indigno de Ser el Primer Hombre Que Ve a Dios
En adelante, el mundo sabrá que Dios se apiada de los pecadores como yo. Dios se apiada de los pecadores que desean violentamente rechazar al mundo y sus apetencias. En adelante, sabrá la iglesia y el mundo entero, que Dios se ha apiadado de un pecador como yo. Sabrán que Dios me ha sentado junto a Él para compadecerse de todos los que busquen su salvación en el mundo. Yo soy el primer hombre que ve a Dios, pero en realidad, yo soy el último y el más indigno de todos en la iglesia.
Volveré a La Presencia de Dios
Yo, Jesé Retoño, quiero reafirmar, aun por encima del insulto y de los males que la iglesia quiera contraer en mí…quiero reafirmar lo siguiente.
Así, como yo he estado en la presencia verdadera de Dios Padre y de Dios Hijo, así mismo volveré de nuevo al lado de Cristo. Volveré a los bazos de mi Padre celestial, quien me ama verdaderamente más que nadie en este mundo. El primer hombre que ve a Dios soy yo mismo, y he venido a dar testimonio por voluntad del Creador.
El Tiempo ha Llegado
El tiempo de mi misión ha llegado. Es hora de prepararse porque Cristo quiere recordarle a “Pedro” (Papa) cuál fue la misión que le encomendó antes de partir de este mundo al lado de Dios Padre celestial. Pedro, el tiempo ha llegado, y los pobres no han visto mi rostro por la corrupción del clero.
Pedro, te rogué, para que cuidaras de mis ovejas, que apacentaras mi rebaño. No que las despidieras de mi iglesia, o que te hicieras de oro para deslumbrar tus templos de piedra. Te rogué por mi iglesia. No por tu magisterio o por tu supremacía de líder. Tus sacerdotes o líderes con sotana, se han corrompido ante mi presencia.
Mensaje a Pedro (Papa)
Pedro, te aseguré que estaría con ustedes todo el tiempo, hasta el fin de los tiempos. ¿Por qué me has defraudado?
Pedro, te mandé que oraras por los pobres, por los incrédulos y los infieles. No que, al contrario, los infieles pudieran ellos acaso orar por un Pedro infiel e inseguro de mi santidad. ¿¡Si la iglesia se ha apartado de mí, podrá, acaso, un infiel salvar a la iglesia y a Pedro?! ¿¡Pedro, si tú te has apartado de mí, quién podrá orar por ti!?
Así como yo les enseñé, así debían ustedes los obispos compadecerse de mis ovejitas, de mis pequeños.
Pedro, el insulto ha llegado a mi presencia, y tú te has hecho sordo. Te aconsejo que compres de mí un buen colirio, que te alivie y te permita ver a mis pequeños, los más pobres y más fieles a mi gloria.
Ecumenismo y Desobediencia de Pedro
Pedro, tu ecumenismo y tu infalibilidad, han torcido mi evangelio. Tu evangelio solo ha logrado que veas a los pequeños que ha ti te hacen gracia. Pero a mis pequeños, a los que dan testimonio con sus vidas y no han torcido mi evangelio, a esos, los has despedido de mi iglesia. Pedro, tu iglesia está moribunda y al pie de la muerte.
Los Pequeños de Pedro (Papa)
Tus pequeños a quienes tu besas, a los que tu paseas, en tus eventos eclesiales, son todos los niños a quienes abrasas como niñera. Pero a mis pequeños, a mis enviados, a mis obreros, a mis instructores, los has golpeado con tu desobediencia. Pedro, por los labios de mi mensajero, por medio de este perrillo callejero, despedido y despreciado por ti, al que tú has expulsado de mi Iglesia, “Yo”, El Existente, te digo que te veo desde aquí, y no apruebo tu desobediencia.
Pedro y Su Ecumenismo: El Primer Hombre Que Ve a Dios es un Estorbo para Pedro
Pedro, tu ecumenismo ha desplazado mi evangelio y mi verdad. El evangelio de mi Padre celestial, lo has sometido bajo las leyes y comodidades humanas. De esta manera, me has puesto como tu servidor y has puesto a Dios, mi Padre celestial, como a un farsante. El primer hombre que ve a Dios es un simple seglar. Es uno de esos seglares que tu, “Pedro”, lo ves como un estorbo. Pedro, mi evangelio y mi cruz ya no son de tu agrado. Te recuerdo mis palabras, “Todo el que quiera salvar su vida, la perderá, pero quien la pierda por mí, ese la encontrará”. Me maravillo por los segundos de felicidad y riquezas que has encontrado con tu fama, pero sin mi Cruz y sin mi Padre celestial.
Dios Espíritu Santo
Yo, Jesé Retoño, todos los días de esta semana, Dios Espíritu Santo, me ha estado llamando. He escuchado a Cristo que me habla.
Es verdad, yo soy, el primer hombre que ve a Dios, pero esto no significa que yo no haya sido llamado desde mi nacimiento. Dios me llamó primero desde el vientre de mi madre en esta tierra.
Yo, Jesé Retoño, he escuchado a Dios siempre desde mi niñez y desde mi infancia.
Hoy, viernes 23 de diciembre del 2022, a las 8:00pm, la presencia de Dios Espíritu Santo, me ha inundado completamente. No pude hacer otra cosa que levantarme de mi pedestal y ponerme a escribir todo cuanto Cristo me revela bajo la presencia de su Espíritu Santo, quien me asiste desde los cielos. Cristo no me abandona ni un segundo, y mientras estoy en esta tierra, mi corazón y mi mente son parte integra de Cristo-Dios verdadero.
Hoy he escrito, solo lo que Cristo me ha anunciado y no me retracto de cumplir con la voluntad de Cristo. El evangelio de Cristo es mi evangelio, y su verdad, es mi verdad.
Millares Serán Bendecidos En Mi Nombre (El Primer Hombre Que Ve a Dios)
Yo, Jesé Retoño, quiero que todos en “Piedrecita” sean bendecidos. Que las apariciones que de en adelante verán por mi medio, los lleve a todos a cambiar para la salvación de ustedes y de todos en la iglesia y en el mundo entero. Millares serán bendecidos en mi nombre. En mi nombre, millares serán escuchados por el amor de Cristo y de Dios, mi Padre celestial.
Bendigo a todos los miembros de Piedrecita. Invito a las multitudes a creer en mí, y amar a Cristo en la obediencia y en la unidad de su única Iglesia. A mis miembros de Piedrecita, les agradezco su inscripción y su apoyo incondicional a este vuestro ministerio, Piedrecita. Mi hijo el mayor, León Jesuita, les bendice y les da su paz en Cristo vuestro Señor. Amen.
Estamos listos, para empezar “La Batalla y el Sol”. Estamos listos para ver a Dios.
¡Empecemos! Pero antes, de empezar, Cristo me ha pedido una cosa más.
Es imperativo que el Papa y los Obispos escuchen la voluntad de Cristo, una vez más, por boca de este perro sarnoso (El primer hombre que ve a Dios), y entonces empezaremos con la “Batalla y el Sol”.
Bendiciones al Papa y a todos en el mundo.
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